La lluvia regresa.
Sale el sol.
Las tormentas se acercan, estallan y se alejan.
Sale el sol.
Llegan las nubes negras…
Llevo años cambiando los muebles de sitio.
Cuando creo que he encontrado el lugar adecuado para
cada uno de ellos, dentro de mí surge de nuevo la necesidad de cambiarlos.
No es una necesidad caprichosa, es una necesidad
vital.
Algo me dice que no están bien cómo están, que han
de ser reorganizados.
Cada día cambio un mueble nuevo, hasta que llega el
momento en el que no sé qué diablos hacer con él, y lo dejo abandonado.
Otras veces sin embargo logro encontrarle el sitio
adecuado y sonrío satisfecha.
Sonrío, sonrío, sonrío…hasta que todo se desmorona y
dentro de mi sangre unas pequeñas gotitas me dicen que he de volver a
cambiarlo.
Esta sensación me hace sentirme confundida, descolocada,
pensativa. Hastiada y sin fuerzas. Débil, como una estrella apagada.
Sé que desprendo luz, pero a veces no logro sentir su resplandor brillando con fuerza y todo se queda a oscuras. Y a tientas
busco dónde me encuentro, pero de tantas veces que lo he cambiado todo no logro
encontrar mi posición.
Ya empiezo a acostumbrarme a no encontrar. Pero no
sé si es bueno acostumbrarse.
Y cuando recobro las fuerzas, vuelvo a colocar los
muebles.
Así una y otra vez. Continuamente.
Me paso el día entero colocando y descolocando
muebles.
Mientras tanto el reloj de la pared no cesa en su
empeño de seguir canturreando: “tic-tac”, “tic-tac”.
Regresa la lluvia. Se aleja.
Regresa la lluvia. Se aleja.
Sale el sol.
Llegan los relámpagos. El viento se los lleva.
Sale el sol.
El agua se desprende de las nubes negras.
Y saldrá el sol ;)
ResponderEliminarEn el instituto (hace casi eónes) tuve un profesor que nos decía: quien tiene ordenada su casa tiene ordenada su vida. Creo que era una invitación a que mantuviésemos el orden en nuestros apuntes, salas de estudio y horarios... Lo que se termina traduciendo en un mejor rendimiento escolar. ¿Ordenar nuestros hogares, nuestras rutinas, mejorarán otros aspectos de nuestras vidas?
Un besote ^^
Siempre sale el sol...
ResponderEliminarA veces pasa. A todos. Ordenar los muebles, cambiarlos de sitio... Mi madre lo suele hacer.
Yo me corto el pelo. Cuando me pongo «organizada»... en privado te lo cuento :P
Besos